Hacer lo que hay que hacer

Reflexión de la Palabra

Lc 17, 7-10 (Mar-14’Nov)

El Evangelio de hoy se centra en el servicio, en la disposición de servir sin esperar recompensa, alabanzas, aplausos, reconocimientos, haciendo lo que hay que hacer, realizando con esmero la prestación, puesto que es clara nuestra posición, y esta es la de siervo, y en ello, Jesús nos da el ejemplo al decir: “como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos” (Mt 20,28). Este versículo muestra el propósito y la misión de Jesús en la tierra, y también es un ejemplo para sus discípulos de cómo deben servir a los demás con humildad y amor.

Este servir, debe ser aquel que no se revela, para que lo realizado por la mano izquierda no lo sepa la derecha (Cf. Mt 6,3-4), como aquello que se hace por la intención de lograr atención, prestigio, fama, sino por aquello que nace del corazón por un bien a realizar. Por tanto, en lo mencionado, ese servicio en lo eclesial también viene a ser aquello que debemos realizar sin interés a algo o por algo, sino aquello que deseamos efectuar por amor a la Iglesia, que se traduce a un amor por los hermanos miembros de esta comunidad. En efecto, volvemos a encontrar en Juan 13,5.12, esa actitud de servicio por parte del Maestro, donde nos enseña que debemos servirnos unos a otros.

A todo lo referido, es clara la acción a realizar, hacer lo que hay que hacer, sin esperar nada a cambio, sin esperar una atención especial, sino simplemente hacer aquello que nos dice el Señor que hagamos (Cf. Mt 25, 34-36). En Colosenses 3, 23-24 dice: "Y todo lo que hagas, hazlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibirás la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor sirves”. Ahora bien, esto aunque no está en las lecturas del día de hoy nos ayuda a entender, que el servicio a la Iglesia, a las personas, es hacerlo a Jesús, del cual coincide perfectamente Mateo 25.

"Haz lo que debes y está en lo que haces". Hacedlo todo por Amor. (Camino, 813).